La gestión por procesos se ha convertido en la forma mediante la cual las organizaciones integran sus procesos con el fin de alcanzar sus objetivos estratégicos, teniendo como base el trabajo de su capital humano y el de sus recursos organizacionales.

La gestión por procesos o la también llamada gestión basada en procesos es uno de los 7 principios fundamentales de la gestión de la calidad en su versión ISO 9001 2015. Su real importancia radica en que los resultados se alcanzan con más eficiencia cuando las actividades y los recursos relacionados se gestionan como un proceso en conjunto.

Es importante indicar que la norma ISO 9001 2015, define un Proceso como «el conjunto de actividades mutuamente relacionadas que utilizan las entradas para proporcionar un resultado previsto». Quizás faltaría indicar la necesidad de que dichas actividades se repitan en el tiempo, y poder así aplicar el ciclo PDCA (Planear, Hacer, Verificar Actuar) o también llamado ciclo de Deming, el cual hace alusión a la mejora continua sobre los procesos, sea cual sea su área de desarrollo. 

Cabe indicar que los procesos deben tener una misión clara dentro del Sistema de Gestión, lo que nos hará fijarles objetivos a alcanzar. Deberán ser medibles para poder analizar el cumplimiento de dichos objetivos, contar con los recursos necesarios para poder funcionar, y tener un responsable que garantizará el control y el buen funcionamiento del mismo. En cada etapa del proceso se debe destacar la trazabilidad para así poder controlar todo el proyecto.

En el Perú tanto las organizaciones públicas como privadas buscan integrar sus procesos, en ambos casos resulta muy complicado dicha labor puesto que no se comprende que el primer paso es capacitar al talento humano, sumado a la integración de recursos para que el persona pueda desempeñar sus labores de la mejor manera. 

Finalmente debemos indicar que se debe buscar tener un clima y cultura organizacional acorde a los tiempos actuales, donde se debe tener por excelencia el bienestar del colaborador, con ello se facilitará la implementación de la gestión por procesos puesto que el trabajador estará concentrado exclusivamente al buen desempeño de sus labores, obteniendo así resultados positivos que son aquellos que esperan tanto los accionistas en el lado privado como los agentes gubernamentales desde el lado público.